El templo

EL TEMPLO
Llame a tu corazón templo sagrado
Con un cáliz de hiel amargo y puro
Un muro de coral espeso y duro
Con sangre de mis venas decorado.

Atolones de coral en tonos variados
Engalanado de sal y blanca espuma
Colgado de tu aldaba en mi amargura
Sediento del cáliz envenenado.

Sorbos de dolor libé en tus labios rojos
Subyugado oí tu voz salir del templo
Cristal de cuarzo líquido salía de dentro
Y en mi cuerpo florecían los abrojos.

Idolatre tu corazón como si fuera
El sol claro y caliente que da vida
Y es mi sangre la que aguanta la embestida
Cuando clavas tus astillas traicioneras.

Llame a tu corazón templo sagrado
Dueño y señor de la diosa que idolatro
Como un necio trovador rezo tus cantos
En la cripta donde guardas tus pecados.
Ana Olmo