
Era un gato grande
Gris atigrado
Un gato muy grande
Todo rayado.
Vivía en el campo
En un gran cortijo
Con una familia
Que tenían diez hijos.
Eran muy traviesos
Y cuando lo pillaban
En su larga cola
Le colgaban latas.
A este gran felino
Lo llamaban fiero
Pero era muy noble
Un gato muy bueno.
Siempre se escondía
Al ver a los niños
Pues le hacían daño
Con tanto cariño.
Unos lo besaban
Otros lo apretaban
Y de sus largas patas
Todos estiraban.
Un día cansado
Cogió su petate
Y su palo de andar
Y se fue de casa
Sin mirar atrás.
Entonces los niños
Lloraron su ausencia
Y se reprochaban
Su mala conciencia.
Echaban de menos
A su amigo fiero
Y se arrepentían
De no ser niños buenos.
Ana Olmo
No hay comentarios:
Publicar un comentario